sábado, 26 de noviembre de 2011

JAVIER MORÁN

NOSTALGIA

La lluvia entona tus suspiros, delicada melodía que humedece.
Tu mirada es la esmeralda perdida en la cúspide estrellada de la noche.
Briosa doncella que galopa al compás de mis entrañas.
Nunca he extrañado a nadie como te extraño a ti.

La sencillez de tu semblanza me acaricia suavemente, y es tarde.
Es tan fácil quererte, tan imposible olvidarte.

Y es que ni el sabor de aquellas bocas han borrado de mi mente tu recuerdo.
Más nunca perdonaste mi osadía, y yo que te creí enamorada.
Nunca reclamaste algo, siempre me creíste: nada.

Así en el último crepúsculo que ilumina mi ocaso
mi dolor se ha repartido con los aires del cielo.
Temor, temor de ser la única mujer de mi vida y no poder amarte
porque aún te quiero.
Y en la oscuridad, donde tu mirada es la esmeralda perdida en la cúspide estrellada de la noche,
donde mi corazón late al compás de tus entrañas,
donde tu rocío acaricia mi voz, siento ardor
Ardor de no poder decirte, buenas noches, mi amor.

Javier Morán (México).


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